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Sueño y trabajo - ¿Qué relación tienen?
Tanto la evidencia internacional, como nuestra propia experiencia, nos han demostrado que los trastornos del sueño no sólo afectan la vida de las personas, sino que también son un factor importante en el desempeño de los equipos de trabajo. Y por lo tanto, en el éxito de las organizaciones.
Si bien los trastornos del sueño son problemas de salud de cada persona, la necesidad de un abordaje sistémico, y el hecho de que no siempre es comprendido su efecto en el lugar de trabajo, nos ha motivado a trabajar con las organizaciones.
Las organizaciones subestiman sistemáticamente este aspecto.
Lamentablemente, aparte de los estudios referidos al trabajo en turnos, en nuestro país no existe una conciencia acabada del impacto que tiene el mal sueño de los colaboradores en el clima laboral, en la eficacia del trabajo colaborativo, en la eficiencia y calidad de toma de decisiones, y por lo tanto, en los resultados finales de una organización y en su capacidad para cumplir su misión y realizar su visión del mejor modo.
Un signo de este desconocimiento es el conjunto de mitos o conceptos errados que existen al respecto, a continuación trataremos algunos de ellos:
Los trastornos del sueño ¿son un problema de cada trabajador?
En realidad, no. Los trabajadores que duermen mal, terminan siendo un problema de su organización como un todo.
La falta de sueño genera reducciones significativas en el rendimiento y estado de alerta.
Reducir el sueño nocturno en cantidad o calidad, incluso parcialmente, podría resultar en una reducción importante del estado de alerta durante el día. Un mal dormir tiene un efecto nocivo que se amplifica en las horas de vigilia.
La disminución del estado de alerta y la somnolencia diurna excesiva afectan la memoria y su capacidad de pensar y de procesar información. Además aumenta a más del doble, el riesgo de sufrir una lesión ocupacional.
¿Por qué no puede resolverlo cada trabajador individualmente?
No basta con permitir a los trabajadores ir al médico para que traten su problema. Lamentablemente, no es tan simple: Los empleados con insomnio generalmente tratan de resolverlo de maneras que pueden parecer lógicas pero que tienen el efecto contrario. En lugar de solucionar el problema, aumentan sus problemas psicológicos al apagar su reloj biológico. Esto empeora aún más el problema.
Es la organización la que debe tomar el problema en sus manos, dado que afecta múltiples variables que inciden en el desempeño, retención de talentos y toma de decisiones.
¿Es un problema exclusivo del trabajo en turnos?
Por supuesto que la calidad del sueño es un tema crítico y evidente en trabajadores sujetos a sistemas de turnos. No obstante, de una forma quizás menos obvia, también lo es en trabajadores con jornadas regulares, diurnas.
Los empleados privados de sueño son propensos al mal humor y menos tolerantes con las diferentes opiniones de los compañeros de trabajo, haciéndolos más propensos a arrebatos y otros comportamientos que destruyen relaciones e impactan a toda la organización. Contribuyen a la ineficacia y a la insatisfacción laboral.
¿Cómo afecta un mal dormir al resultado de una organización?
La privación moderada del sueño produce deficiencias en el rendimiento cognitivo. Muchos problemas de clima laboral, desempeño, capacidad de tomar decisiones y evaluar riesgos, coordinar el trabajo entre equipos o dentro de cada equipo, tienen su origen en trastornos del sueño.
La paradoja es que muchas organizaciones atacan estos síntomas con talleres, consultorías, diagnósticos de clima, cambios organizacionales, y una serie de medidas costosas de implementar… siendo que a veces la causa es increíblemente simple: no tener un descanso apropiado.
Por supuesto existen otras causas posibles para lo que hemos señalado, pero es cada vez más claro que la falta de un sueño efectivo está en la raíz de muchas brechas de motivación, desempeño y rendimiento.
Las empresas pueden ser 24x7. Las personas no.
Es frecuente escuchar, en el entorno corporativo o laboral, el llamado al compromiso y al alto rendimiento. Es cierto, los entornos son cambiantes, los clientes son más exigentes, la reputación de las grandes organizaciones está más desafiada que nunca. No hay espacio para perder tiempo o resistirse a los cambios que nos permiten sobrevivir.
¿Buscando la excelencia y el alto rendimiento?
Si quieres que tu equipo sea de alto desempeño, trátalo como tal. Incluso los mayores talentos de tu empresa tendrán un desempeño mediocre y serán infelices si duermen mal: La receta perfecta para perder capital humano.
La noticia es que, así como los deportistas de alto rendimiento, los equipos de alto rendimiento necesitan imperiosamente un descanso adecuado.
Es evidente que el alto rendimiento y el compromiso son claves para un resultado excepcional. Pues bien: es imposible lograrlo si los colaboradores no están totalmente lúcidos y alerta. Esa lucidez, motivación y compromiso sólo son posibles si el sueño ha sido adecuado.
El impacto de los trastornos del sueño en la economía de los EE. UU. se estima en más de 400 mil millones de dólares al año en pérdidas económicas. No hay estudios en Chile que permitan cuantificar el impacto en nuestra economía, pero dada la alta prevalencia de los trastornos del sueño, todo indica que la productividad de muchas organizaciones es afectada por este fenómeno, que es sistemáticamente subestimado.